El Tribunal de Justicia de la Unión Europea acaba de pronunciarse y ha sido rotundo: el acuerdo "Safe Harbour", por el cual las compañías podían mover los datos que recogían de sus usuarios europeos a Estados Unidos para tratarlos o almacenarlos, ha sido invalidado. Los tribunales de cada país miembro tendrán vía libre ahora para declarar, si así lo estiman, que este tratamiento de los datos personales de sus ciudadanos es ilegal.
"La existencia de una Decisión de la Comisión que declara que un país tercero garantiza un nivel de protección adecuado y seguridad de los datos personales transferidos no puede dejar sin efecto ni limitar las facultades de las que disponen las autoridades nacionales de control", explican desde el Tribunal de Justicia. Además, éste critica que la normativa no permite que el ciudadano acceda a dichos datos personales para rectificarlos o anularlos, lo que "vulnera el contenido esencial del derecho fundamental a la tutela judicial efectiva".
¿Qué es exactamente el "Safe Harbour"?
En el año 1998 entró en vigor la Directiva de Protección de datos de la UE, que entre otras cosas prohibía que se transfirieran datos personales de ciudadanos europeos a otros países de fuera de la Unión que no cumplieran ciertos requisitos de protección. Según dicha Directiva, muchas compañías de Estados Unidos se quedaban fuera. ¿Qué hicieron entonces la Comisión Europea y EEUU? En el año 2000 firmaron un acuerdo especial, de nombre "Safe Harbour", para el intercambio de datos.
Cualquier compañía de Estados Unidos puede solicitar formar parte de dicho acuerdo, que sin embargo tiene unos requisitos muy fáciles de cumplir y que están por debajo de los que pide la Unión Europea en lo que a política de protección de datos se refiere. Es una especie de "atajo" o trato de favor, por definirlo de alguna forma: a las empresas estadounidenses se les exigen tan sólo unas condiciones muy laxas y que ellas mismas comprueban para poder transferir datos personales de europeos a sus sedes en Estados Unidos.
"La existencia de una Decisión de la Comisión que declara que un país tercero garantiza un nivel de protección adecuado y seguridad de los datos personales transferidos no puede dejar sin efecto ni limitar las facultades de las que disponen las autoridades nacionales de control", explican desde el Tribunal de Justicia. Además, éste critica que la normativa no permite que el ciudadano acceda a dichos datos personales para rectificarlos o anularlos, lo que "vulnera el contenido esencial del derecho fundamental a la tutela judicial efectiva".
¿Qué es exactamente el "Safe Harbour"?
En el año 1998 entró en vigor la Directiva de Protección de datos de la UE, que entre otras cosas prohibía que se transfirieran datos personales de ciudadanos europeos a otros países de fuera de la Unión que no cumplieran ciertos requisitos de protección. Según dicha Directiva, muchas compañías de Estados Unidos se quedaban fuera. ¿Qué hicieron entonces la Comisión Europea y EEUU? En el año 2000 firmaron un acuerdo especial, de nombre "Safe Harbour", para el intercambio de datos.
Cualquier compañía de Estados Unidos puede solicitar formar parte de dicho acuerdo, que sin embargo tiene unos requisitos muy fáciles de cumplir y que están por debajo de los que pide la Unión Europea en lo que a política de protección de datos se refiere. Es una especie de "atajo" o trato de favor, por definirlo de alguna forma: a las empresas estadounidenses se les exigen tan sólo unas condiciones muy laxas y que ellas mismas comprueban para poder transferir datos personales de europeos a sus sedes en Estados Unidos.